Dar una presentación puede ser una experiencia desafiante, tanto que cerca del 75% de la población siente o sintió alguna vez glosofobia, es decir, miedo a hablar en público. Si te pasa, te comparto 3 técnicas que te ayudarán a romper este miedo.
La confianza no aparece de la nada, pero con la preparación adecuada, puedes lograr que tu próxima presentación sea un momento fluido, claro y seguro. Puedes construir la confianza a través de tres pasos fundamentales que te ayudarán a sentirte preparad@ y a mantener el control durante tu presentación.
1. Arma “el guión”
Un guión bien estructurado es la base para una presentación exitosa. No se trata solo de saber qué decir, sino de tener claro cómo lo vas a comunicar. Para captar la atención de tu audiencia desde el inicio, es fundamental tener una comunicación de impacto, elegir un buen gancho que atrape a los oyentes. Hay varias formas o técnicas para lograrlo: puedes comenzar con una historia personal, o de vida, una frase motivadora o generar curiosidad sobre lo que viene a través de una pregunta poderosa. El inicio de una presentación es crucial, la clave es que el público sienta el deseo de seguir escuchándote
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Después de ese potente inicio, el siguiente paso es organizar tus ideas principales, identifica esos puntos esenciales que deben estar sí o sí en tu discurso. Asegúrate de que sean claros, concretos y fáciles de recordar, tanto para ti como para tu audiencia. Y por último, prepara un cierre impactante que motive a la acción, que inspire a tu audiencia a aplicar lo que han escuchado.
2. Practica, practica y sigue practicando
La práctica es el elemento más importante para ganar confianza. La práctica deliberada es clave para la mejora. Es decir, no basta con repetir sin más, sino que debes enfocarte en mejorar con cada ensayo.
Una regla clave es repetir tu presentación al menos siete veces. La repetición te ayuda a internalizar el contenido y también a encontrar distintas maneras de decir lo mismo. Aquí es donde entra el reconocimiento de las “muletillas”, esas palabras o gestos repetitivos que restan fluidez a tu discurso. Para eliminarlas, sigue estos pasos:
- Grábate: amígate con tu voz y tu forma de hablar. Escuchar tu propia voz te ayuda a ser más consciente de tus palabras.
- Escúchate: una forma efectiva es si si sueles enviar audios de WhatsApp, escúchalos con atención. Así identificarás patrones de discurso.
- Transcríbete: escribir lo que has dicho en voz alta te permitirá detectar muletillas que pasan desapercibidas.
- Fílmate: así sabrás si repites gestos o movimientos que distraen, como mover las manos o caminar de un lado a otro.
- Mírate: analiza tu lenguaje corporal y ajusta aquellos gestos que no aportan a tu mensaje.
El reconocimiento es el primer paso para mejorar. Al practicar, te volverás más consciente de tu comunicación, tanto verbal como no verbal, y poco a poco lograrás eliminar esos hábitos.
3. Todo listo para responder
Uno de los mayores miedos a la hora de pensar en dar una charla, son las preguntas que puedan llegar a hacerte, las cuales no sabes cuáles serán y por lo tanto creer que no vas a poder responder. Sin embargo, una parte clave de cualquier presentación es estar preparad@ para lo inesperado, por eso es importante contar con técnicas para afrontar el miedo a recibir preguntas en tu presentación (te dejo toda la info en esta nota).
Ya sea que te sientas en un momento de duda, que te has perdido o “quedado en blanco”, siempre debes tener presentes las dos o tres ideas principales de tu discurso. Estos conceptos actúan como “focos” que te guiarán en caso de que pierdas el ritmo del discurso. En lugar de bloquearte, simplemente recurre a una de esas ideas y verás cómo retomas el control de la situación.
Este enfoque no solo te da seguridad, sino que también mejora tu fluidez y capacidad de improvisación. Recuerda que, según estudios de la Universidad de Stanford, los oradores más eficaces no son aquellos que memorizan sus discursos palabra por palabra, sino aquellos que logran conectar con su audiencia a través de ideas claras y flexibles.
El proceso de preparación para una presentación efectiva es uno de los aspectos claves para el éxito. A través de estos pasos, no solo lograrás ganar confianza, sino también mejorarás tu capacidad para conectar con tu audiencia de una manera auténtica y memorable.
Por Verónica Salatino, Licenciada en Comunicación (UBA) y Coach Ejecutiva (ICF), Head & Founder de Makana Comunicación Estratégica & Coaching Ejecutivo.